
Foto por: Pedro Zamacona (Yaconic)
En 1973 miles de chilenos se vieron sorprendidos por un golpe de estado y el inicio de una dictadura que, entre otras cosas, se dedicaba a desaparecer y/o matar a todo aquel que estuviera en contra de las ideas que se imponían. Durante esa época muchos escaparon del terror y se refugiaron en México, que los recibió con los brazos abiertos.
Hoy, a más de 40 años del golpe, los chilenos siguen llegando, pero en lugar de arribar con miedo e historias de terror, nos traen música: rock, reggae, pop, hip hop o una fusión de todo lo anterior. Entre los inmigrantes musicales llegó, hace siete años, Mariel Villagra, voz de Mariel Mariel, su proyecto musical, junto al guitarrista Andrés Landón.
Mariel decidió dejar su tierra para buscar nuevos horizontes musicales. Aunque para muchos es difícil dejar su hogar, no lo es para un alma viajera:
“Lo decidí bastante tiempo antes de venirme, no sé exactamente cuando pero quería irme de Chile y vivir en otro lado. Ese país tenía mucha carga para mí en cuanto a lo histórico, social, familiar, todo. Quería salir a flote un rato. Me sentía lejos del mundo. Necesitaba estar en un lugar más central. Vine a México y me dije: ‘voy ir a conocer el país donde voy a vivir el resto de mi vida’, aunque no sé si voy a estar aquí toda mi vida.”
Así es Mariel: segura y decidida. ¡Qué mujer! Pero también es curiosa, su corazón necesitaba viajar; su curiosidad necesitaba saciarse, y su hambre de aprender era tanta que no podía quedarse en un solo sitio.
Hambre de aprender, eso es quizá lo más importante en ella. Aún cuando estudió música clásica se decidió por lo contemporáneo ya que no quería pasar su vida en busca de una silla en una orquesta. Esto también la ha llevado a escuchar todo tipo de géneros, lo cual no siempre fue del agrado de sus colegas:
“La Mariel empezó escuchando folclor con su papá [Pedro Villagra], pero luego, por una distancia obvia que uno tiene con sus padres, se enrolló muy fuerte con el rock argentino; en Chile con Los Prisioneros y Los Tres. Luego descubrió el mundo del pop, un acto de rebeldía debido al prejuicio que había. Eso incluso le provocó quiebres con compañeros de universidad y de proyectos en los que estaba metida. Le decían: ‘me gusta Frank Zappa’ y ella respondía: ‘me gusta Beyonce’. Ese fue el camino que la llevó a la música urbana, los beats y el hip hop”.
A pesar de que el sonido actual de Mariel es una mezcla lo anterior con una base de beats electrónicos y urbanos, no siempre fue así. Al inicio de su carrera, en Chile, la catalogaron entre las estrellas pop. Esto debido a que aún no encontraba la manera de plasmar lo que en realidad quería en su música:
“Había una onda con los productores que elegía, cuando terminaba un disco sentía que me querían llevar a un lugar que yo no quería. También había un movimiento de soul y funk en Santiago muy fuerte pero muy local, o sea que no tenía posibilidades de convertirse en algo comercial. Mi primer productor le tenía pánico a eso y me decía que me fuera mejor por el pop rock. Pero yo lo único que quería era experimentar, así que si había alguien con conocimientos que me pudiera guiar pues para allá iba porque me di cuenta que era muy ecléctica y podía interpretar cualquier tipo de música”.
Establecerse en México le ha permitido ser libre a la hora de componer y experimentar con cuanto ritmo se le ponga enfrente. Pero para lograr esto tuvo que sacrificar la comodidad de una carrera que parecía encaminarse al éxito:
“Creo que si no hubiera salido de Chile a lo mejor estaría ocupando un buen lugar en el pop femenino. Pero no me arrepiento de no haber sido una estrella pop, a pesar de que mi primer disco a la semana de salir ya estaba sonando en MTV y la radio. Me consideraban una de las poperas más grandes del país. Pero dije: esto es pura apariencia, yo lo que quería era tocar mejor, girar, autoproducir y abrir más mi cabeza”.
El estilo de Mariel no es común encontrarlo en la escena del país y menos en la voz de una chica. Pero cuando le pregunté si esto le ha llegado a crear algún conflicto respondió sin mucha preocupación:
“Los que tienen un conflicto son los que lo están presenciando desde el público. Yo ya lo asumí y entendemos que estamos abriendo cabezas, no hay una misión más honorable que esa, muy noble. Pero sí, si yo fuera un güey y dijera, ‘arriba las manos, toque y roll’, estarían haciendo slam, pero como soy una vieja se asustan, se preguntan: ‘¿qué esto?, ¿es su onda?, ¿es una puta?, ¿es una imitación de algo que no conozco?”
A pesar de ser la cara del proyecto, Mariel reconoce que el verdadero genio es Landon, al cual conoció en su época universitaria y que convenció de unírsele:
“A Landon lo conocí a finales de los noventa. Yo estaba en la escuela de música clásica; él en la de música moderna y en la de jazz. Tengo el síndrome del bicho raro así que estaba estudiando clásica pero también contemporánea y me sentía bastante desencajada porque no tenía mucha cabida lo actual, lo popular en el sentido moderno. Por lo tanto yo me juntaba más con los chicos de la escuela moderna. Ahí estaba Landon, primero oí hablar de él porque tocaba el bajo y era como un ídolo porque dominaba su instrumento bastante bien, Él tenía una banda de rock, nos conocimos, participamos en algún proyecto, después se fue a Francia varios años y cuando regresó, en 2006, me lo encontré en una fiesta y le dije que estaba armando mi banda y me dijo que sí, empezó como el bajista y ahora ya es el director de la ‘orquesta’”, dijo Mariel.
Gracias a su disco Foto pa Ti, Mariel Mariel se ha ganado ya un lugar en el underground nacional, y su propuesta ha formado parte de festivales como el Vive Latino. Sin embargo, su música no parece explotar en el mainstream. Para la chilena, esto sólo es cuestión de tiempo:
“Es un sonido que apenas está llegando a Latinoamérica y muchos no lo entienden. Cuando toqué en Chicago y Los Angeles la gente ya conocía todos los códigos porque, al ser un público latino, tienen incorporado lo que es ser alguien que viajó y que cambió su cultura, eso hace que lo adopten más fácil”.
Por el momento no tiene planes de un nuevo disco, ya que quiere llevar Foto pa Ti a todos los lugares que se pueda, así como darle tiempo a la gente de acostumbrarse y aceptar su sonido. Ella es Mariel Villagra.
Publicado en: Yaconic